CUENTO DE LA BOLSA DE VALORES

LA BOLSA DE VALORES Y MRS RATONES
En el año 1923 en el planeta tierra, existía un pueblo triste y desolado, llego a el Pepita Mendieta con la finalidad de ayudar a ese pueblo inhóspito, ella pertenecía a una gran empresa financiera y su jefe era Tanino Montaño, Pepita convoco al pueblo para ofrecerles dinero por cada ratón que cazaran y se lo llevaran la propuesta inicial fue de $1000 por cada ratón, la gente del pueblo vio la gran oportunidad de ganar dinero , además por que ese pueblo esta pagado de ratas, pasaron los días y los meses y Pepita noto que ya iban menos personas a vender ratones entonces ella subió su oferta a $1500, se reactivo de nuevo la venta de ratas pero pasado 10 días más, se freno de nuevo la oferta de ratones para la cuál pepita empezó a pagar $2500 por cada ratón, esta subida de precios de compra por las ratas incentivo a las personas del pueblo, y se reactivo nuevamente la venta, pasados 3 meses, Pepita convoco al pueblo y les dijo que ella debía presentarse a la empresa pues que tenia cosas por hacer entonces que les proponía que ella les vendía todas las ratas que tenia y que en ocho días venia su jefe Tatino y les compraba las ratas por el doble de valor que ella las vendía, el pueblo emocionado por dicha propuesta saco sus ahorros, presto dinero y fue donde Pepita a comprar las ratas que más pudieran, ya que tenían la ilusión que en 8 días duplicarían su inversión.
Desde hace 2 años la gente del pueblo sigue esperando a su jefe Tanino o a Pepita para vender los ratones que compraron endeudándose y con los ahorros de su vida.
MORALEJA
El dinero fácil nunca es bueno, así funciona la bolsa de valores es un mercado incierto; hace un tiempo atrás se vivió algo parecido con las pirámides, hoy en día el poder de manipulación que pueden ejercer los "poderosos" sobre la masa de ahorradores y "pequeños inversores", observándose que utilizando técnicas más modernas como grandes campañas de prensa, televisión e internet logran "colocar" sus acciones con promesas de excelentes utilidades que al final no se cumplen.